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El presidente y entrenador del Inter Ibiza recibe una sanción «muy dura» tras los incidentes ocurridos el pasado 30 de abril

El Comité de Competición ha decidido imponer un castigo ejemplar a Carlos Fourcade, máximo responsable del Inter Ibiza, de categoría Regional. Ni más ni menos que un año y dos meses de inhabilitación tras los incidentes ocurridos el pasado 30 de abril durante el partido frente a la UD Ibiza-Eivissa (0-3), en la que el conjunto de David Porras se proclamó campeón de la categoría.

«Nunca se había impuesto una sanción tan dura en el fútbol ibicenco, por lo menos que yo recuerde», afirma Vicente Bufí, delegado insular de la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB). «La sanción es un poco ejemplarizante, aunque no tiene mucho sentido que se le castigue más por las manifestaciones, aunque fueron una falta de respeto hacia los árbitros y la Federación, que por su actitud durante el partido, encarándose con el árbitro y quitándole las cartulinas, que era mucho más grave», añadió Bufí

Tras el encuentro, Fourcade pidió comparecer ante los medios de comunicación para denunciar «la persecución arbitral» que, en su opinión, sufría el equipo y los intereses creados para que ascienda la UD Ibiza-Eivissa. Antes, durante el partido, se había encarado con el colegiado, Ismael Santos Lara, al que llegó a arrebatar las cartulinas y arrojarlas al suelo tras ser expulsado. «¿Hasta cuándo el mamoneo en Eivissa?», se cuestionaba un Fourcade muy enojado con el arbitraje.

«No me preocupa»

«No me importa ni me preocupa la sanción. Me da igual, como si hubiesen decidido castigarme durante cinco años. Lo único que me preocupaba era que fuesen contra el club, que no tenía nada que ver. Sin embargo, lo que me enoja es que me castigan, sobre todo, por las declaraciones que hice. Yo no difamé a nadie y, si eso es falso testimonio, que me lleven a juicio. Lo que está muy claro es que al que habla un poco le cortan las piernas para que no destape la mafia que hay montada aquí», aseguró, por su parte, Carlos Fourcade, que también señaló que no piensa «recurrir» la sanción.

En principio, la inhabilitación es por su ficha de delegado, aunque Fourcade, que ejerce de entrenador sin titulación, además de ser presidente y médico del club, tampoco podrá hacer ninguna otra función en el terreno de juego. «La única duda es si afecta a su función en el cuadro médico, aunque posiblemente en ese caso esté exento. Lo que sí es seguro es que no podrá realizar ninguna labor en el terreno de juego, ni como técnico ni como delegado o encargado de material», declaran fuentes de la Federación.

La inhabilitación de Fourcade, que por el momento era cautelar hasta que el Comité de Competición recabase información de ambos clubes y del propio interesado antes de dictar sentencia, se aplica a partir del 30 de abril y se prolongará hasta el próximo 30 de junio de 2018.

Diariodeibiza