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Los jugadores del Palmer Alma Mediterránea 2020-21 ya se encuentran disfru-tando de unas más que merecidas vacaciones junto a los suyos. Es el caso de Ja-cobo Díaz. El jugador madrileño llegaba cedido del Lenovo Tenerife y lo hacía con la esperanza de aportar su grano de arena en un proyecto que daba sus primeros pasos. Acabada la temporada, Díaz se ha ganado a pulso ser considerado como uno de los grandes nombres de la temporada y una pieza clave dentro del es-quema del Palmer Alma Mediterránea Palma. Antes de marcharse a Tenerife para estar con los suyos, el madrileño ha hecho balance de su paso por el equipo ma-llorquín y de su estancia en Mallorca.

“Colectivamente ha sido una buena temporada. Todos hemos mejorado, hemos te-nido nuestros momentos a lo largo de la temporada y eso nos ha hecho más fuer-tes” asegura el jugador madrileño que también reconoce que la temporada que está por finalizar en breves “ha sido larga”. “Todos estamos bastante contentos con nuestro papel colectivo e individual”, subraya Jacobo que califica de “atípica” la temporada vivida. “El hecho de estar un tanto aislados por el tema del Coronavirus nos ha hecho estar más juntos, ser una familia”, admite.

Sobre la temporada indica: “Ha sido como una especie de ciclo. Empezamos en un equipo en el que no estábamos todos los jugadores y nos fuimos conociendo poco a poco. Ese sentimiento de familia que se ha formado tanto con las derrotas como en las celebraciones por las victorias se ha ido solidificando a medida que íbamos logrando victorias y consiguiendo pequeñas metas”.

Asegura Díaz dejar el Palmer Alma Mediterránea Palma siendo mejor jugador de lo que era cuando llego a la isla. “Creo que podría hablar por casi todos y diría que hemos entrenado muchísimo y todos somos mejores jugadores de lo que éramos en agosto al llegar. A veces, eso no se puede lograr en temporadas normales por-

que se centra más en los resultados y nosotros creo que hemos podido compagi-nar ese hecho, hemos logrado compaginar los resultados del equipo con la mejora individual”, afirma el ala-pivot cedido esta temporada por el Lenovo Tenerife.

En cuanto a lo que se lleva de su paso por el Palmer Alma Mediterránea Palma, Jacobo Díaz subraya: “Obviamente me llevo las victorias y las celebraciones pero sobre todo me llevo un grupo de gente que es muy complicado de igualar. Es muy complicado encontrarse con dinámicas y ambientes tan positivos que ayudan a la mejora y a reducir las situaciones de estrés. Tanto jugadores, entrenadores, perso-nal del club, patrocinadores y afición han sido de diez durante la temporada y eso es lo que me llevo” asegurando además que desde ya es seguidor del equipo. “Voy a estar siguiendo a este equipo. Ha sido mi segunda casa en la LEB Oro y creo que ha sido una temporada muy importante para mi. Siempre voy a recordar al club por darme la oportunidad y a mis compañeros