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La mallorquina Maria Antònia Gomila consiguió clasificarse para los dieciseisavos de final de la CEV Volleyball Challenge con el CV Sant Cugat, mientras que el ibicenco Moisés Rodrigo se despide del torneo continental con el Grupo Herce Soria.
Al voleibol balear le tocó vivir las dos caras de la moneda esta semana. La cara fue para la líbero mallorquina del CV Sant Cugat, Maria Antònia Gomila, quien logró clasificarse para la siguiente ronda de la CEV Volleyball Challenge tras superar al Infomaniak Geneve Volley por 3-1 en el partido de vuelta de los treintadosavos de final. La cruz fue para el central ibicenco del Grupo Herce Soria, Moisés Rodrigo, quien a pesar de ganar por 3-0 en el segundo partido de la eliminatoria ante el Cisneros Alter Tenerife, no consiguió el pase a los dieciseisavos de final y dice adiós al torneo continental.
En Sant Cugat el conjunto catalán lo tenía todo de cara para superar esta primera ronda de la CEV Volleyball Challenge Cup. Tras ganar la ida por 0-3 en Suiza, el equipo de Maria Antònia Gomila se jugaba, con la tranquilidad de tener el apoyo de su gente, el acceso a los dieciseisavos de final. Aun así, el equipo de la manacorina arrancó el partido cediendo el primer set por 18-25, aunque fue un simple espejismo, ya que el CV Sant Cugat inmediatamente se puso el mono de trabajo para no dar ninguna opción a su rival imponiéndose en los tres siguientes sets (25-11, 25-16 y 25-21) para sellar su histórica clasificación a la siguiente ronda continental en la que se verán las caras contra el Reale Mutua Fenera Chieri italiano el 13 de noviembre, un difícil partido ante el vigente campeón de la competición en el que el conjunto catalán tendrá que sacar su mejor versión.
En Soria el conjunto local tenía una difícil papeleta para intentar su pase a la siguiente ronda. Los de Moisés Rodrigo llegaban a esta vuelta ante el Cisneros Alter Tenerife tras perder por 3-1 en la ida en Canarias y tenían que imponer su dominio e intentar forzar el set de oro para colarse entre los 32 mejores equipos de la competición. Y, de hecho, lo logró. El equipo del central Moisés Rodrigo se hizo con los tres primeros sets (25-19, 25-18 y 25-19) con cierta contundencia y llevando el partido a un Golden set que sería decisivo. Pero ahí, tras empezar ganando, el equipo soriano vio como el canario le remontaba el marcador para terminar venciendo el encuentro y arrebatarle la clasificación a la siguiente ronda. De esta manera, la aventura europea de Moisés Rodrigo llega a su fin, pero aún tiene toda la temporada nacional por delante para seguir creciendo y aprendiendo.