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Se cumple ya poco más de un año del cierre del Estadi Balear. El pasado mes de Junio de 2013, la patrulla verde del área de urbanismo del Ajuntament de Palma decretó el cierre cautelar del recinto blanquiazul por amenaza de derrumbe y el consiguiente peligro para la integridad física de los usuarios. 

Esa decisión marco un antes y un después para la gran familia del Atlético Baleares que tuvo que emigrar prácticamente por toda Mallorca con el fin de poder dar cobijo a todo el fútbol base de la entidad palmesana.

Ahora, con una nueva propiedad al frente, se buscan soluciones y este próximo martes, en primera convocatoria a las 17.30 y segunda a las 19 horas, se celebrará en los locales de la ONCE situados en la Calle Manacor se celebrará una transcendental junta general de copropietarios. En ella se decidirá de una manera definitiva, el futuro del Estadi de la Vía de Cintura. El único punto del día está muy claro:Salvar el vetusto Estadi Balear.

Los copropietarios decidirán si aprueban el proyecto de arreglo y la consiguiente derrama de lo accionistas. En caso contrario desgraciadamente se seguirían los pasos del Lluis Sitjar con el coste que conlleva la demolición que puede ser mucho mayor que el de la reforma.

Fernando Miró, cabeza visible de los copropietarios y su junta directiva, encargó en su día un exhaustivo estudio a la empresa Eurolosa de Elche, propiedad del aparejador Ignasi Martínez en dónde un test de última generación, el BIM, evaluó el estado actual del Estadi Balear.

Según ha podido saber este diario la solución para el campo de la Vía de Cintura pasa por la reducción parcial del propio Estadi BAlear. La remodelación alcanzaría un coste cercano a los 600.000 euros, incluidos impuestos, tasas, proyectos y vestuarios

Se mantendría la tribuna de preferencia remodelada totalmente y que tendrá capacidad para cerca de 8000 espectadores.

El proyecto podría estar acabado en un plazo récord de solo seis meses. En las últimas fechas, como se acordó en la pasada asamblea en el mes de enero se ha trabajado a fondo con el objetivo de poder localizar a los copropietarios, y el esfuerzo ha dado sus frutos ya que se ha podido localizar a cerca de 700 de los 2000 títulos que conforman la propiedad. Algunos de esos propietarios disponen de una o varias acciones del tipo A tribuna cubierta y tipo B tribuna sol.

A otros, en cambio ha sido muy complicado o imposible encontrarlos. El presidente de la Procampo, Fernando Miró, reconocía a este medio la transcendencia de esta asamblea y recordaba que los propietarios del estadio decidirán su futuro y tendrán la ultima palabra. En caso de no llegar a una solución se hablará con el Ajuntament de Palma para decidir un futuro que sin duda no será nada halagüeño.

Fuente  Pedro Bonet para Fútbol Balear.
informa sportsdecanostra.com