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Ha parado todos los dobles penaltis que le han lanzado esta temporada, 4 de 4. Ante Peñíscola Bodegas Dunviro detuvo dos, uno en la última acción del partido que dio la victoria a los baleares. Vuelve a su mejor nivel tras tres años irregulares debido a las lesiones.

Carlos Barrón vuelve por sus fueros. El portero del Palma Futsal se ha convertido en el parapenaltis de la temporada. De momento, el meta balear ha detenido los cuatro dobles penaltis que le han lanzado hasta la fecha siendo un seguro en este aspecto de los partidos. En el último encuentro ante Peñíscola Bodegas Dunviro detuvo dos, sobre todo el último que supuso la victoria para su equipo una vez que el tiempo se había ya agotado. Ha parado uno a Ríos Renovables Ribera Navarra, otro a Jumilla Montesinos y los ante Peñíscola. El meta se ha convertido en una pieza clave del equipo en este gran arranque de temporada en la que todo el equipo está brillando con luz propia y en el que han conseguido cuatro victorias en los seis partidos disputados lo que les mantiene en la zona alta de la clasificación.

Barrón vuelve por sus fueros después de varios años en los que el infortunio le ha marcado deportivamente. Desde ser convocado con la selección y no poder acudir por una lesión a perderse gran parte de los partidos de las últimas campañas debido a este aspecto en el que no ha tenido suerte. El año pasado llego a Palma con una lesión en una mano y apenas pudo jugar ya que cuando lo consiguió se volvió a lesionar y apenas pudo terminar la temporada. Este año es diferente. Por primera vez en las últimas tres temporadas ha completado la pretemporada con el equipo y ha comenzado con regularidad y jugando a un gran nivel. Es una de las piezas fundamentales en el sistema defensivo del equipo y ha vuelto a adquirir el rol que se espera de un cancerbero de su nivel.

Barrón reconoce que «fue decisivo el doble penalti porque quedaban cero segundos, una falta injusta y pensé que pegaría un chut fuerte y intenté tapar todo lo posible para no encajarlo. Lo importante era ganar y conseguir los tres puntos fuera de casa». El portero afirma que es una faceta que se entrena y que tienen bien controlada desde el cuerpo técnico del conjunto balear: «Todo es entrenable, durante esta temporada me han tirado cuatro y este ha sido muy decisivo. El cuerpo técnico ya nos enseña a los especialistas en dobles penaltis y se puede intuir dónde lo pueden tirar. Yo siempre intento estar lo más cerca de la pelota para quitar el mayor ángulo posible. Es una faceta en la que me siento protagonista y en la que tengo muy buen resultado» apunta.

Barron vuelve a ser feliz bajo palos tras las lesiones que ha sufrido en los tres últimos años y que le han hecho ver la cara negativa del deporte. «Lo importante para un portero es la continuidad y después de tres años de lesiones haber comenzado con el equipo me ha ido genial. Es temprano para pensar en la selección porque hay muy buenos porteros ahora tengo que centrarme en el equipo y que el equipo sume victorias» a lo que añade la importancia de mantener el nivel porque «el papel del portero es fundamental en fútbol sala, muchas veces dicen que es el sesenta por ciento del equipo porque un fallo suyo porque un fallo suyo puede ser determinante para el resultado».